Las Jaulas
Me
había agachado para juntar la comida que se había caído al piso. La puerta de
la jaula había quedado abierta, como tantas otras veces. Cuando me enderecé pude
sentir la brisa de sus alas rozándome la cabeza. Y al levantar la vista vi su
panza hinchada de mijo, pintada de colores brillantes. Mientras estuvo dentro
de la jaula nunca había distinguido esos colores en su plumaje.
Se
posó sobre la parte más alta de la biblioteca y me esquivaba la mirada. Miré el
interior de la jaula y así, vacía, me pareció excesivamente chica para el
pájaro que ahora me observaba desde el último estante del mueble abarrotado de
libros.
Recordé
que la ventana de la sala había quedado abierta desde la mañana, pero acercarme
a cerrarla sería una invitación para que el pájaro comprobara que la sala era
una jaula más, sólo que mejor decorada.
¿Cómo
convencer al animal de desandar la primera parte de su aventura? Tal vez
podríamos compartir el espacio de la sala, le dejaría la comida y el agua sobre
la mesa, taparía la biblioteca para que no la ensucie y durante mis momentos de
lectura, compartiríamos ese espacio. La idea empezaba a entusiasmarme. Cerré la
puerta de la jaula y al mismo tiempo, el pájaro se paró en el techo.
¿Quería
volver a entrar? ¿Festejaba mi decisión de que la jaula quedara vacía? Salí de
la habitación y cerré la puerta, preferí no seguir presenciando la escena del
esclavo que extraña sus cadenas.
Cuando
volví a la sala, esa misma tarde, el pájaro estaba parado en el postigo de la
ventana abierta. Miraba hacia afuera, hacia los balcones de los edificios de
enfrente, tan cercanos al mío que muchas veces había podido oler las comidas
que se cocinaban.
Descorrí
la mitad de la cortina que cubría el vidrio del otro postigo y abrí la ventana
de par en par, el pájaro me miró y saltó a ese abismo de diez pisos. Lo vi en
el cielo, brillaba a contraluz del sol. Era hermoso.
Gracias por el cuento. Está bien escrito, coherente en tiempo y lo importante, me dio los segundos de lectura en entretención. Tras ellos reflexionar, me pondré a abrir ventanas, una metáfora.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu lectura y tu comentario, David! Un abrazo!
EliminarBastante bueno. Engancha y significa. Si tuviera que decir algo negativo diría que se abusa del punto. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu lectura y tu comentario!
Eliminar